Cuando estando la Remigia a boca de parir y se le aparece en el sueño una especie de brujo o hechicero diciéndole que el hijo se llamará Tiresias, ella ya adivina que lo que lleva en su vientre es algo diferente, especial, casi sobrenatural. Sin embargo, Tiresias es un niño enfermizo, medio ciego, igual que su homónimo griego: Tiresias, el adivino ciego.
Lo que no le impedirá convertirse en pastor de esas sierras que, aun siendo un paraíso terrenal, se han ido vaciando en un goteo incesante.Pero es a la noche, escuchando la radio, cuando se va a producir el milagro. Esa locutora del programa “Desde la distancia te quiero”, en el 96.4 de la FM, que parece hablarle exclusivamente a él, al pastor perdido en una aldea abandonada, transformará su existencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario